Viña Rock 2005, viernes por la noche. Villarrobledo. Un cartel espectacular, que casi hace que los 50 euros que cuesta una pulserita roja de papel se paguen a gusto. Un tiempo estupendo. Los Def Con Dos, en el escenario, acaban de tocar Pánico a una muerte ridícula y se disponen a afrontar la recta final de su concierto. A mitad de canción, se desvanece el sonido. El grupo musical tarda un poco en darse cuenta porque al parecer sus monitores sí funcionan y ellos siguen escuchándose. Se quedan un momento parados sobre el escenario con cara de gilipollas y entonces el público cae en la cuenta: les han cortado el sonido. A media canción. Casi al mismo tiempo, las pantallas gigantes muestran un mensaje en letras blancas sobre fondo azul:
En el escenario de al lado, el siguiente grupo (creo que era Molotov, pero hoy no confío demasiado en mi memoria) empieza a tocar.
El pantallazo azul con que el Viña ha despedido todos sus conciertos de este año se ha cargado de un plumazo el espíritu del festival. Ha borrado del mapa algunas situaciones entrañables, como la de estar cagándote en el grupo que toca antes del que tú quieres ver mientras la gente que tienes al lado se lo goza a lo loco. Ha barrido por completo los bises, que marcan la diferencia entre un concierto del montón y uno épico. Algunos grupos se han quedado sin tocar sus mejores canciones, aunque supongo que la organización razonará que la culpa es suya por colocarlas al final del espectáculo. Hay que ver qué cosas tienen estos músicos. Y quienes no han reescrito su lista de canciones, quienes no se han adaptado a la política del "ni un minuto más", se han quedado sin sonido.
Vale, podía ser un coñazo que un grupo muermo prolongara su concierto hasta la náusea, pero esta solución de apagar los altavoces es como matar moscas a cañonazos. Este remedio es peor que la enfermedad. Y, no nos engañemos, no es que sea una medida precisamente rockera. No me hubiera extrañado del FIB, pero sí de un festival que en esta edición se pavoneaba de tener en cartel a Sepultura. De todos modos, incluso aceptando "cuadrícula" como forma de optimizar la diversión, lo de O'Funkillo no tuvo nombre. Viña Rock 2005, sábado por la noche. Último concierto. Los andaluces consiguen levantar ("treinta mil hippies, ¡sesenta mil cuernos!") a un público muerto de cansancio, que lleva bebiendo y saltando desde antes de las cinco de la tarde. Tras hora y media de concierto, el cantante dice que solamente quedan cinco minutos de música y que hay que aprovacharlos para montarla bien gorda. Pero no cuela el farol. Se queda un momento mirando a un lado y dice por el micro: "Quillo, déjanos un minutito de sonido aunque sea". Pausa. O'Funkillo decide jugar su última baza. Un. Dos. Un, dos, tres, y... silencio. Saltos en el escenario, público indignado, peña embrutesía.
¿Qué respeto llevó a los iluminados de Matarile a darle al interruptor? ¿El respeto al público? Pues a juzgar por los silbidos y los "hijooos de puuuta", el público estaba por la labor de continuar la fiesta. ¿Por respeto a los músicos? ¿A qué músicos? Ya no quedaba ningún otro grupo por tocar y los O'Funkillo querían seguir. ¿Dónde estaba el problema? ¿En los kilowatios? ¿En los decibelios? ¿En los euros? Pues habernos cobrado cincuenta céntimos más a cada uno, leche.
Pese a todo, el festival estuvo de puta madre. Hubo buenos conciertos, hubo fiesta, hubo alcohol. Hubo persecuciones con los seguridades. Hubo cervecitas en el pueblo, a la sombra. Hubo buen ambiente, hubo gente estupenda. Lástima que tuviera que ser la organización quien empañara un festival rock cojonudo.
es como si te quitasen los 5 minutos de remolonear tras sonar el despertador. A mi tb me fastidió bastante, quedaba un poco ortopédico terminar un concierto como si el grupo tuviese un cabreo de cojones con el público.
Pero la verdad es que en general MEJOR IMPOSIBLE. Un musicon constante, un ambientazo, un sol de justicia (toy como una gamba)y muymuy divertido!! me perdí algun concierto como por ejemplo Def con dos , me perdí yendo a Villarrobledo, manda huevos! y además cnd llegamos había una cola para entrar en camping que pa qué...a pesar de todo me río yo del Fib ahora mismo! Viña 2005 muy bien !
Con cosas como estas, todos tenemos un trauma con las pantallas azules!!! serán cab***es!!!
Enviado por: Documentamania, 15 de Mayo 2005 a las 02:38 PMHola Manu! Jo, verás que me he aficionado a leer tus historietas, porque me divierte la forma en como las cuentas y como ves la vida, porque comparto muchas de tus opiniones. Porque me parece curioso que haya por ahí gente como yo y mis amigas superamigas (las toda la vida, vaya), que cada vez que salimos de fiesta pillamos el trancazo del siglo y siempre nos preguntamos si el resto de la peña hace lo mismo a nuestras edades (26), que parecemos crías (desde los 15 igual), porque nosotras vamos cubata tras cubata hasta que muchas veces ya no sabemos ni quienes somos, ni donde estamos, ni con quien hablamos!
...Y al día siguiente el remordimiento de conciencia con la resaca del siglo: Marta, no te sabes controlar, tia...
Aunque tiene su lado bueno, y es que como el alcohol nos deshinibe, acabamos conociendo a los encargados y porteros del garito, entre otra mucha gente, y es que nos da por el paliqueo con tó dios una cosa mala!