10 de Agosto 2004

[Formentera] Pre

El despertador sonó en su momento y resultó que ya era el día en que salíamos hacia Formentera. Llevábamos algún tiempo planeando el viaje (planeando los ferrys, más bien, porque las previsiones terminaban tan pronto pisáramos nuestra isla de destino), pero anoche no se nos ocurrió ninguna idea mejor que acercarnos a la fiesta del FIB en la playa, donde los visitantes que todavía aguantan y los castellonenses sin mucho que hacer se reúnen por una vez y bailan juntos. O se asquean de la música, en mi caso. De todos modos, sonó el despertador y yo aproveché el momento para llamar a mis alumnas y cancelar todas mis clases. De esta manera conseguía un objetivo doble: por una parte no me pagarían el dinero que me debían y así tendría algo a la vuelta, y por otra ganaba un tiempo necesario para hacer la maleta, que el autobús hacia Dènia salía muy pronto.

Libreta para apuntar chorradas- Una tienda de campaña.
- Un bañador, que nunca se sabe cuándo será necesario.
- Tres pares de calcetines, todos los que tenía limpios. Tres gallumbos.
- Unos pantalones cortos, cuatro o cinco camisetas de manga corta, unos vaqueros, un jersey por si acaso.
- Una cámara digital.
- Una libreta que daban de publicidad de Cocacola, por si nos apetecía apuntar alguna cosa. Un boli.
- Seis paquetes de Camel, uno de Samson blanco (el menos fuerte) y un par de libritos de Rizla. El Mechero Único.
- Unos cuantos CDs.
- Un pañuelo negro con calaveras.
- Un cepillo de dientes.

En el autobús hemos sido testigos de la resaca del FIB. Los asientos de delante estaban ocupados por jóvenes derrotados, durmiendo o pensando (digo yo) que no se merecen que al conductor del bus le guste la emisora Kiss FM. Después de la música FIBera que tuve que tragarme anoche, yo creo que se merecen eso y mucho más. Pero les comprendo, pobres. A mí tampoco me hace ninguna gracia. Hablando de lo que nos espera en la isla, Susana ha utilizado las expresiones "canibalismo" y "Battle Royale", lo cual al menos ha conseguido preocuparme un poco y distraerme de la música pastelosa del autobús.

¡A Ibiza!
Curioso que en un barco llamado Manuel Azaña arriaran la bandera española nada más salir de puerto...

Hemos desembarcado ya de noche en la isla de Ibiza, primera parada obligatoria de nuestro viaje y antro maldito y lleno de turistas italianos. El primer palo nos lo hemos llevado al intentar encontrar una consigna donde librarnos de los mochilones para poder dar una vuelta por los garitos de la isla: 36 euros del ala por guardárnosla hasta mañana. Casi ná. Se nos ocurre el plan genial de localizar una pensión donde alquilar una habitación individual y utilizarla de almacén, pero Ibiza no es la isla apropiada para ese tipo de cosas. Aquí, si quieres una consigna la pagas. Y si quieres una habitación te jodes, que está todo lleno.

Pub Suy, IbizaPero de camino, y mientras asumíamos que íbamos a tener que cargar con las mochilas esta noche, hemos conocido una parejilla muy maja y un bar estupendo, el Pub Suy (c/ Jaime I, 6), con mesitas bajas en la calle, cojines en el suelo y una camarera muy amable que nos echa una foto y nos avisa de que ha llamado a la policía por un problema con la alarma, que no nos asustemos que no va por nosotros. Y que intenta indicarnos un buen lugar para dormir en la calle, aunque luego nosotros no le hagamos caso y terminemos la noche en la muralla del castillo, con las cabezas sobre las mochilas por si los cacos y, supongo que no por última vez, con las estrellas sobre las cabezas.
 

Enviado por Manu, 10 de Agosto 2004 a las 11:59 PM

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